Empresarios a los 15 - Notas sobre la experiencia
En esta realidad local donde la imagen de éxito la ostentan políticos o pseudo-empresarios distribuidores de riqueza que no generan; donde negociar significa traficar influencias y entrar en el círculo corrupto e indigno de los “negociados” con el estado; donde nuestro sistema educativo tiene como pilar fundante la Educación Tributaria; donde no existen desde hace mucho tiempo en los programas oficiales enfoques hacia el emprendedor; donde han desaparecido los mensajes de respeto a la libertad y a la propiedad privada; donde la diatriba contra la Riqueza se transforma en dogma estatizante; mi preocupación llegaba a niveles poco soportables a principios del año 2008, cuando mi hijo mayor debía comenzar el camino de adoctrinamiento que la educación obligatoria de nuestro país representa hoy en día.
En ese mismo año el Instituto María Auxiliadora de la ciudad de Rawson, provincia de Chubut, abría la materia Informática, fuera de currícula oficial, destinada a alumnos de 15 años, que cursan lo que en nuestro sistema educativo se denominaba “Primer Año Polimodal”.
Los directores, gente de muy buena fe y corazón, preocupados por el futuro de los alumnos, tuvieron la valentía de ofrecerme, a pesar de conocer mis inclinaciones, consideradas radicales aquí, hacia la filosofía objetivista, la libertad y la propiedad privada, el guiar la materia, dándome total libertad para diseñar y desarrollar el plan de estudios correspondiente.
El objetivo formal de esta materia es que los alumnos desarrollen criterios para la utilización avanzada de las aplicaciones informáticas de oficina disponibles. Y se enfoca especialmente en planillas de cálculo.
La metodología elegida fue la que generó sorpresa y dudas en un principio: básicamente, los alumnos deberían generar un emprendimiento real y administrarlo con la ayuda de las aplicaciones de oficina. Por supuesto, por considerarlo un experimento educativo, obviaríamos todos los procedimientos administrativos que requiere nuestro gobierno para fundar un emprendimiento, pago de impuestos y demás.
La guía que ofrezco en este caso, como profesor, trata de ser lo menos "directora" posible. Favoreciendo que detecten los procesos que satisfagan mejor al emprendimiento elegido, reduciéndola en lo posible a consejos sobre la utilización de planillas de calculo y aplicativos para la administración del emprendimiento.
El desafío propuesto, a principio de año, es lograr que el emprendimiento genere una determinada cantidad de dinero hacia final de año. Como docente trato de inmiscuirme lo menos posible en la dinámica que se genera automáticamente, veo como se forman grupos de trabajo libremente, como se producen y se resuelven conflictos, etc. Intervengo, en general, únicamente cuando los mismos alumnos lo requieren.
Este último año 2009, el desafío propuesto fue obtener con el emprendimiento 1000 pesos argentinos. Puede parecer un desafío menor para nuestra visión adulta, pero a su edad y siendo que todo lo que obtuvieron hasta entonces fue siempre dado por sus padres, es suficiente para despertar esa catarata de ideas y acción que tan vivificante y esperanzadora es.
Las similitudes con lo propuesto en el artículo 3 semillas mágicas – Descubriendo el espíritu empresarial me llenaron de orgullo y satisfacción mientras leía, gratamente sorprendido y emocionado, que no estaba solo en el deseo de transmitir y generar el sentimiento de emprender. Crear algo con esfuerzo e inteligencia, ofrecerlo en el mercado libremente, y al fin del día verificar las ganancias produce reacciones en los niños que emocionan y renuevan esperanzas en un futuro mejor.
Por supuesto, me encuentro abierto a cualquier consejo que puedan brindarnos para mejorar nuestro trabajo y receptivo a recursos y herramientas adicionales que me recomienden.
Muchas gracias por motivarnos.